jueves, 9 de agosto de 2012

No puedo olvidar esa tarde en el café. Mirandonos las caras sin mirar.
Creyendo que jamás acabaría, que sería eterno lo inmortal.
Te extraño, pero no puedo olvidar. 
Tengo esa tarde clavada en mi memoria, no la quiero borrar.
Estabas tan perfecto, tan lindo, tan natural. No cambiaría nada.
No había palabras, solo miradas. Esas miradas que tanto dicen sin decir nada.

No puedo olvidar esa tarde en el café. Mirandonos las caras sin mirar.
Tocar tu mano, sentirte ahí... saber que fue real.